El Torrrexón de Villamoréi

El Torrexón de Villamoréi es una antigua torre de vigilancia, de probable origen romano (siglo II) y reconstruida por Alfonso II El Casto (siglo IX).
Seguir el camino que de Villamoréi accede a las inmediaciones del Torrexón, acondicionado recientemente como senda verde, es un agradable paseo ideal para hacer con niños o en una jornada con muy mal tiempo.

Datos prácticos

Punto de partida y llegada: Villamoréi, pueblo situado entre Rioseco y Soto de Agues.
Desnivel aproximado: 80 mts de subida y los mismos de bajada.
Tiempo aproximado: 1h 25 m

Descripción de la ruta

Empezamos la ruta junto a la capilla del pueblo (395 msnm). Al instante la calle se bifurca en dos, debemos seguir por la de la izquierda, que pronto cruza el pueblo y sale de él pasando por debajo de una gran roca.
Viene a continuación una subida, en la que el camino marcha encajonado entre prados.
Enseguida termina la cuesta y ya tenemos ante nosotros una buena perspectiva sobre el embalse y Rioseco.
Un corto tramos de escaleras da paso a un pequeño collado en el que hay unas mesas y unos bancos. Desde aquí divisamos ya , sobre la compuerta del embalse, las ruinas del Torrexón.



Una vez superadas las mesas el camino se convierte en una senda, que cruza una zona de castaños y nos deja enfrente de las ruinas.
Podemos continuar un poco más y bajar hasta su base, donde están los restos de unas cabañas.
Hasta aquí habremos invertido unos 40 minutos de marcha.
Acceder hasta la torre ya es bastante más complicado y sólo lo deben hacer personas que no sufran vértigo. Un sendero bordea el peñasco de cuarzita sobre el que se levanta el castillo por su ladera izquierda, hasta que se asoma sobre la vertiente de la carretera.



Aquí tenemos dos opciones para seguir.
La primera consiste en subir directamente hacia la torre. Para entrar en ella tendremos que salvar un paso un poco aéreo justo al lado del torreón.
La segunda consiste en bordear unos metros por debajo la torre hasta encontrar una subida por la cara que mira a Rioseco. Lo inestable del terreno hace aconsejable extremar las precauciones, ya que un resbalón puede ser fatal.
Una vez arriba (455 msnm) (5 m / 45 m) marcharemos quizas un poco decepcionados del estado en el que se encuentra la torre.



Extremando la atención, regresamos a las cabañas en ruinas y volvemos sobre nuestros pasos al pueblo (40 m / 1h 25 m).